No en vano se dice que el whisky y los cigarros van de la mano y esto se debe a que cada uno realza los sabores del otro, pero no toda botella que se abre se adapta a la experiencia (el whisky ahumado no siempre se adapta por sus sabores). Es por eso que en 1999 la Destilería Delmore comenzó a producir un whisky especial y aromático para acompañar al cigarro hasta que en 2009 se detuvo la producción. Después de muchas solicitudes, decidieron volver a colocar la botella en los estantes y, desde entonces, ha protagonizado bastantes revistas de cigarros y ha ganado medallas de oro en concursos internacionales de whisky sin falta. El whisky se envejecerá en barricas de barban, jerez y vino cabernet sauvignon.
Color - carmesí intenso
Olor - aromas de vainilla, miel, canela, frutos rojos, chocolate
Sabor - un cuerpo rico con toques de mermelada de frambuesa roja, canela, caramelo y algunos taninos creados por las barricas de vino
Final : largo y achocolatado con toques de naranja y canela.
